Mientras un grupito de anticubanos manipulados por Miami trasladaba su campaña de odio bajo la marquesina del tejado de la estación de tren a causa de la nevada, la Asociación Suiza-Cuba llevaba a cabo su acción con motivo del Día de los Derechos Humanos en el casco antiguo de la capital, conocido por sus numerosas fuentes especiales. Así que no era más que lógico buscar la protección de la Justizia, que se alza en lo alto de la Fuente de la Justicia.
Las siguientes pancartas se utilizaron para llamar la atención sobre la injusticia que sufre Cuba a manos de EE.UU. y sus vasallos en Europa: «¿Qué pasa con los derechos humanos en territorio estadounidense?» aludiendo a ello con un «prisionero de Guantánamo» (vestido de un mono naranja), exigiendo «¡FAIRPLAY FOR CUBA!» y finalmente alabando a Cuba: «Aplausos, Cuba vive la totalidad de los derechos humanos».
